El revestimiento preexistente de la fachada en piedra caliza, se ha combinado en las aberturas de los escaparates con chapa de hierro en tono negro, creando en su zona intermedia un friso que oculta el forjado e integra la rotulación corporativa retroiluminada y la persiana de seguridad.

Los escaparates a modo de cubos escenográficos, se presentan enmarcados exteriormente mediante pletinas de hierro en tono rojo, constando en su trasera posterior de composiciones fotográficas en blanco y negro, realizadas con diversas iconografías de complementos como; bolsos, zapatos y pulseras.

Dada la neutralidad cromática de las composiciones fotográficas, se potencia el producto expuesto mediante un atractivo efecto de caleidoscopio realizado mediante espejos fumé enfrentados lateralmente que potencia las distintas figuras y prendas de modo geométrico y simétrico.

Las Zonas y La Distribución, están divididas en dos plantas y se articulan de un modo práctico y fluido.

Cuando se accede a la tienda el cliente encuentra una doble altura en la zona central, desde donde desciende el leitmotiv del proyecto, un mueble central realizado en plancha de acero inox plegado, conformando en su recorrido estantes, planos de apoyo, y desembarcando en una bancada que abraza en su longitud un mueble isla contenedor.

En la planta superior del comercio, reside la peculiaridad de la boutique dado que dispone de una Zona Expositiva Reservada únicamente a los clientes que se les trata de dar un servicio y una atención más personal e íntima, por lo que se consigue que a través de los espejos fumé-espía visualmente desde el nivel inferior no se puede visualizar el interior de la zona de reservado, proporcionando de éste modo al visitante de la planta superior una mayor amplitud visual y sobre todo un aprovechamiento de la luz natural entrante a través de las aberturas superiores de los escaparates de fachada.